El embarazo de tu perra puede ser un momento bien difícil, pero enternecedora para todos. Al supervisar de cerca el avance y darle alimentos nutricionalmente equilibrados y adaptados, vas a estar seguro de que sabrás que estás dando a la madre y a los perros chiquitos el mejor principio viable. Ahora que tu perra está embarazada, además de preparar bien su cama y cerciorarte de que se sienta cómoda, es necesario que le des una atención alimenticia adecuada que apoye su salud y la de sus cachorros. Este medicamento se emplea para tratar inconvenientes de tiroides en los perros y su empleo no interfiere al embarazo, la lactancia ni los perros chiquitos. Sin embargo, la enfermedad es hereditaria, con lo que si tu perra sufre de hipotiroidismo es mejor que no se embarace. En verdad, aun durante el embarazo, el veterinario podría prescribir que tu perra se pusiera alguna vacuna que la resguardara a ella y a sus futuros bebés de patologías como la rabia, el parvovirus o la hepatitis.
Por esta razón es muy importante asegurarse de que la comida de la perra contiene todos los nutrientes que precisa; algo que repercutirá en el desarrollo de los perros chiquitos. Pasada una semana verás como su bol de comida va a estar prácticamente sustuido por este nuevo alimento cargado de nutrientes tanto para ella como para las futuras crías. Durante los primeros días, mezcla la comida para perros chiquitos en sus porciones habituales de a poco. Es fundamental ofrecerle raciones pequeñas de comida múltiples ocasiones cada día a la par que su papá o mamá humana vigilan su apetito.
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Una perra embarazada, por norma general y según múltiples veterinarios asturianos consultados por Wamiz, puede llegar a perder el apetito. Singularmente durante la tercera y la cuarta semana de gestación debido a las náuseas o vómitos, similares a las “náuseas del embarazo” humanas. Para asistirla a hallar la energía agregada que precisa para amamantar a su hambrienta camada, prosigue alimentándola con la fórmula para cachorros que comenzó a comer durante la gestación. Su mayor contenido calórico y los nutrientes añadidos le aportarán resistencia y le ayudarán a producir leche de alta calidad para sus perritos.
Acude Al Veterinario
Por consiguiente, la alimentación de la perra debe cuidarse mucho más que jamás para que se sostenga fuerte ya que debe velar por su salud y por la de sus crías. La caja de parto debe ser lo suficientemente grande para que tu perra pueda estirarse por completo . También, es fundamental que las paredes sean altas para evitar que los cachorros salgan hasta que no cumplan las seis semanas de edad. En esta etapa, aconsejamos complementar su dieta con aceite de salmón -de 2 a 3 cucharitas al día según tamaño y raza- en una sola toma. Esto le proporcionará más calorías, necesarias para agradar las demandas energéticas del embarazo.
Caso de que las inquietudes persistan es importante que acudamos, lo antes posible, al veterinario para confirmar o descartar el embarazo de nuestra mascota. Dado a que la ingesta calórica de una perra embarazada es mayor, lo más conveniente es añadir media ración más a su porción habitual. O sea si nuestra perra normalmente consume un tazón de pienso, por mencionar un ejemplo, a lo largo del embarazo vas a deber ofrecerle taza y media.
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Indudablemente vas a ver que se esconde en lugares oscuros y tranquilos o que coloca mantas en una región específica de la vivienda. Complementa su alimentación con una porción diaria de leche, tu perra lo agradecerá. A lo largo del embarazo es primordial que el animal esté adecuadamente hidratado, la leche da nutrientes que le van a sentar realmente bien. Ten en cuenta el tamaño y las preferencias de tu perra al elegir la comida para perros chiquitos que le vas a dar.
En este articulo te contaremos qué es lo que hay que tener en cuenta y de qué manera darle a ella y a su camada el más destacable comienzo viable. De esta manera, asistirás a garantizar la buena salud de tu mascota y la de sus perros chiquitos a lo largo de todo el periodo de tiempo de gestación y en sus nacimientos. El parto de la perra no reduce la exigencia nutritiva para la madre canina. La llegada de los cachorros supone comenzar la producción de leche para alimentar a sus pequeños. Y la lactancia se encuentra dentro de las ocupaciones que mucho más energía necesitan en la vida de una perra.
El embarazo de la perra dura entre 63 y 67 días, y constituye una etapa muy exigente para la futura madre canina. El cuerpo de las perras en estado experimenta cambios importantes para amoldarse a los perros chiquitos que medran en su interior. Las futuras crías caninas no cesan de aumentar su tamaño, y necesitan poco a poco más nutrientes, que reciben mediante la placenta.
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¿De Qué Manera Ha De Ser La Alimentación De Una Perra Preñada?
La alimentación de la perra embarazada es clave para dar tanto a la madre como a los futuros cachorros, la energía, proteínas y nutrientes que necesitan. Elembarazo de la perra dura entre 63 y 67 días, y forma una etapa muy exigente para la futura madre canina. Los veterinarios aconsejan continuar dándole comida para cachorros debido al contenido calórico y los nutrientes añadidos que implica esta fórmula, básicos para aportarle resistencia a la perra y asistirla a generar leche de calidad para sus crías.
Este accionar es frecuente en la mayoría de perros, tanto si son hembras como machos y tanto si tuvieron cachorros recientemente tal y como si no. Rascan la cama por comodidad, para dormir en un lugar más mullido, asimismo para liberar energía si han juntado por falta de ejercitarse, por marcar el territorio e incluso para regular la temperatura, tanto propia como la de la cama, y de esta manera reposar mejor. Mide y controla las raciones para eludir que coma bastante y desarrolle obesidad, ya que esto ocasionaría inconvenientes durante la gestación y el parto. Si te preocupa el peso de tu mascota a lo largo de la gestación, asiste a tu veterinario. Tienes que ir introduciendo la novedosa comida en su dieta paulativamente, para ofrecer tiempo a que su sistema digestivo se ajuste.
Estas ganas de vomitar que padecerá la perra comentan que logre perder el apetito a lo largo de la tercera y cuarta semana de gestación. Por ello, hay que sugerir a la futura madre pequeñas raciones de alimento y de manera repetida a lo largo del día. No obstante, si las ganas de alimentarse no vuelven, se recomienda una solicitud a su veterinario. Si tu perra está embarazada es fundamental que cuides de ella durante toda la gestación. Deberás preparar todo el parto a fin de que pueda dar a luz a sus cachorros en un ambiente interesante, limpio y relajado.
Los paseos diarios son un enorme ejercicio de baja intensidad para las perras embarazas. La mayoría de los perros pueden seguir sus travesías cotidianas durante su embarazo. Tienes que aumentar el volumen de este alimento a partir de las 6-8 semanas de la gestación y dependiendo del número de perros chiquitos que esté gestando. En el último tercio del embarazo de tu perra (a los 42 días) le puedes mudar a un alimento de perros chiquitos normal . Tampoco emplees fármacos humanos para tus perros y menos a lo largo de la preñez de la perra.